viernes, 31 de enero de 2014

Consumo de películas en Europa (1): qué vemos, cuánto, dónde y por qué

      Este pasado martes, en el marco del Festival Internacional de Cine de Rotterdam, tuvo lugar la presentación de un extenso infrome sobre los hábitos de consumo cinematográfico (es decir, películas) en Europa, auspiciado por el recién estrenado programa Europa Creativa (nueva reformulación del extinto Programa MEDIA). El día anterior, este estudio fue presentado a un grupo reducido de profesionales y académicos, entre los que tuve la fortuna de encontrarme. El informe, de más de 900 páginas, lleva por título  A Profile of Current and Future Film Audiovisual Audience y recoge los resultados de una vasta encuesta online (504 preguntas) realizada entre marzo y abril de 2013 en diez países europeos: Alemania, Croacia, Dinamarca, España, Francia, Italia, Lituania, Polonia, Reino Unido y Rumanía. En total, se recogieron 4.608 respuestas (unas 460 por país), dentro de una muestra estadística aunque limitada por edad (entre 4 y 50 años). Esta investigación ha sido realizada por las consultoras Harris Interactive (encargada de la encuesta), Attentional y Headway International (estas últimas responsables del análisis de datos y tendencias). En este artículo, y en otros venideros, iremos desgranando los principales resultados.



     Antes de comenzar, conviene realizar algunas apreciaciones. Para empezar, es encomiable que los responsables de política audiovisual europea –encabezados ahora por Xavier Troussard– hayan encargado un estudio de semejantes dimensiones, con el objeto de conocer con detalle los hábitos de consumo de películas y el perfil concreto del público cinematográfico europeo, y también que querido contrastar los resultados tanto con representantes de la industria como con investigadores académicos. Sin embargo, los resultados deben ser matizados por varias razones. En primer lugar, discriminan a los mayores de 50 años, que en el fondo también pertenecen al público cinematográfico tal y como este estudio lo entiende (es decir, espectadores de películas en cualquier soporte o ventana), y además con un gusto más selectivo. En segundo lugar, algunas preguntas de la encuesta carecen de rigor metodológico (a preguntas mal formuladas, respuestas poco reveladoras o distorsionadas). A ello se une que la encuesta se han traducido a los distintos idiomas de manera literal y sin tener suficientemente en cuenta la idiosincrasia de cada país. Por último, la selección de países no parece muy justificada: engloba a los cinco principales países de Europa Occidental, y a otros cinco elegidos sin un criterio homogéneo claro. Con todo, a la hora de comentar los datos generales –como hacemos aquí–, estas limitaciones se atenúan.

Cuánto cine vemos

            Para empezar, este estudio revela que el 97% de los encuestados ve películas con cierta periodicidad, y el 54% afirma hacerlo diariamente. Este último porcentaje resulta llamativo y probablemente necesitaría ser contrastado. Sin embargo sirve para refrendar que el cine sigue siendo una de las opciones de entretenimiento favoritas. Ello se deduce también del alto porcentaje que ve al mes más de 5 películas (48%), es decir, más de una por semana (figura 1).

Figura 1: Nº de películas vistas al mes
Fuente: A Profile of Current and Future Audiovisual Audience (2014) 

Dónde vemos películas

            En cuanto a las pantallas, prácticamente en 100% de los encuestados posee al menos un dispositivo o pantalla en la que ver películas, y el 86% tiene una sala de cine a no más de media hora de casa. En otras palabras, el cine –desde el punto de vista de pantallas, sean grandes o pequeñas– es universalmente accesible.

            Contrariamente a lo que cabría esperar, el 87% ve películas en las salas, el 90% en televisión, el 89% en vídeo doméstico (en cualquiera de sus formatos) y el 62% en internet (porcentajes acumulativos). El desglose completo lo recoge la figura 2.

Figura 2: Desglose por pantallas o plataformas
Fuente: A Profile of Current and Future Audiovisual Audience (2014) 

            Como se aprecia, el 68% descarga películas películas de modo gratuito, y el 56% las ve gratuitamente en streaming. Aunque esta pregunta se hizo con intención de medir el índice de piratería, lo cierto es que no está bien formulada, ya que algunas plataformas ofrecen algunas películas de manera gratuita y legal.

            En cuanto a las razones que inclinan al público a internet frente a las ventanas convencionales, el 50% piensa que ir al cine es caro, y también el vídeo-bajo-demanda (VOD) e incluso el alquiler de DVDs. Otras motivaciones incluyen la facilidad de acceso (31%), la falta de disponibilidad de títulos en otros mercados (30%), o no haber podido ver esas películas en su momento (28%).

Qué tipo de cine vemos

            A la hora de elegir una película, los dos criterios más importantes son el género y el tipo de historia, seguida del reparto. Otros elementos como los premios, la nacionalidad o el nombre del director no parecen importar tanto (figura 3).

Figura 3: Criterios de elección 
Fuente: A Profile of Current and Future Audiovisual Audience (2014) 

            El informe también ofrece un desglose por géneros (figura 4), aunque comete el error de desglosarlos en demasía, cuando cada vez se aprecia más el mestizaje entre ellos. Concluir que la comedia (el 44% ve a menudo este tipo de películas), la animación (24%) o el drama (21%) son los géneros preferidos no llama la atención, pero quizá sí el documental (23%), lo cual llama la atención, ya que no se estrenan tantos documentales cinematográficos (quizá los encuestados incluyan ahí todo tipo de documentales).

Figura 4: Desglose por géneros
 
Fuente: A Profile of Current and Future Audiovisual Audience (2014) 
            Finalmente, en cuanto a nacionalidad, en parte los resultados son esperados (el cine norteamericano es el favorito, con un 58% que lo ve a menudo), aunque llama la atención el porcentaje significativo de otras cinematografías, tanto nacionales (20%) como europeas (14%), e incluso de terceros países (5%). Estos porcentajes son todavía más sólidos si incluimos la opción de películas vistas “de vez en cuando”. De ser riguroso, este dato sería muy revelador acerca del gusto cinematográfico amplio que posee el público europeo.

Figura 5: Desglose por nacionalidades
 
Fuente: A Profile of Current and Future Audiovisual Audience (2014) 

Por qué vemos películas

            Dejo para el último lugar –en esta primera entrega– una pregunta que el informe recoge en sus primeras páginas. ¿Por qué nos gusta ver películas? Las respuestas más frecuentes revelan el poder mágico del cine como medio de evasión y entretenimiento, y también de conocimiento e intercambio cultural, así como su dimensión social (figura 6).

Figura 6: Por qué vemos películas o vamos al cine
 
Fuente: EAC Report 2013

Continuará…

            El informe desglosa cada uno de estos aspectos en sus variables socio-demográficas (sexo, edad y nivel educativo o económico), y en cada uno de los países incluidos. Todo ello constituye una primera parte. La segunda, se centra en la propuesta de ciertos perfiles de espectadores cinematográficos identificados según hábitos de consumo. A ello se une un exhaustivo estudio de las 100 películas más taquilleras en cada país, durante el período (2010-2012) y una serie de consideraciones finales. Dedicaremos los siguientes artículos a comentar varios de estos resultados, y recogeremos lo relativo al caso español.



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1 comentario:

  1. La verdad es que con las facilidades de hoy en dia referente a la tecnologia se pueden ver peliculas completas, sin necesidad de salir de nuestra casa, ademas de ver las pelicula que a nosostros nos guste, y es mucho mas economico, y no la que las salas de cine nos ofrezcan que ocaciones no son tan buenas.

    No obstante se deben seguir implmentando ideas,estrategias que logren captar la atencion de uno como espectador/consumidor y ofrecer mejores considiones el el servicio, precio de las entradas,lo que comemos en el, si no quieren que se dejen de visitar las salas de cine.

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